Los vecinos de Canillas de Aceituno y Sedella se beneficiarán de la mejora de la seguridad vial gracias a las obras que se están llevando a cabo en la carretera MA-4105, que conecta ambos municipios. Las obras, realizadas por la Diputación de Málaga, tienen como objetivo la estabilización de un talud en el punto kilométrico 1+380, un tramo que, debido a los frecuentes desprendimientos de piedras, ha sido una preocupación constante para la seguridad vial en la zona.
El talud en el que se están realizando los trabajos presenta una pendiente elevada, con zonas que superan los 70 grados, y en el que los desprendimientos se habían convertido en un peligro constante para la circulación. Con esta intervención, se instalará una pantalla de contención dinámica de cuatro metros de altura a unos 18 metros sobre la calzada, lo que evitará futuros deslizamientos de piedras y mejorará la seguridad vial en este tramo.
La estabilización del talud permitirá una circulación más segura para todos los conductores y peatones que transiten por la zona. Además, se realizarán trabajos de restauración del asfalto, con el uso de 110 toneladas de aglomerado asfáltico en dos capas (base y rodadura), y se repondrá la señalización viaria en toda el área afectada.
Estas obras forman parte de una serie de intervenciones en diversas carreteras de la provincia que buscan mejorar la seguridad y conectividad de la red viaria provincial. La diputada de Fomento e Infraestructuras, Nieves Atencia, ha explicado que las obras están siendo ejecutadas por la empresa Geocaminos, SL y que su inversión asciende a 289.913,48 euros.
El proyecto también incluye la instalación de una malla metálica de triple torsión a lo largo de la superficie afectada, con anclajes de acero para garantizar la estabilidad a largo plazo del talud. Además, se usarán 16 metros cúbicos de hormigón para la restauración de las cunetas.
Con la estabilización de este talud y la mejora de la carretera, los vecinos de Canillas de Aceituno y Sedella podrán disfrutar de un tránsito más seguro y fluido, eliminando los riesgos que representaban los desprendimientos y la estrechez de la calzada.